Enrique Arancibia Clavel el 30 de septiembre de 2004, cuando recibió una condena a doce años de prisión.
Imagen: AFP
Tras la hipótesis del "robo"
Por Raúl Kollmann
Enrique Arancibia Clavel, el "ex agente de la DINA chilena" condenado por el doble asesinato en 1974 del general chileno Carlos Prats y su mujer en Buenos Aires, fue asesinado de manera sangrienta en la madrugada del jueves: le clavaron once cuchilladas, algunas en la cara, y con tanta violencia que la profundidad de los cortes llamaron la atención de los forenses. Las hipótesis son tres: un drama pasional, una deuda con alguno de los choferes que trabajaban para él o un taxi boy que terminó robándole y asesinándolo. En principio, para los investigadores la hipótesis más probable es la del taxi boy, ya que según los primeros testimonios requería los servicios sexuales de varios jóvenes. Arancibia Clavel fue encontrado en su departamento de Lavalle al 1400.
El cuchillo con el que lo mataron no fue encontrado y no se trataría de uno de los cuchillos del departamento, sino que el asesino lo habría llevado a la escena del crimen. De la vivienda de Arancibia desaparecieron 35.000 dólares.
En el entorno actual del espía chileno, es decir entre los vecinos, los choferes de sus taxis y los jóvenes que contrataba para mantener relaciones, nadie conocía su pasado como agente de la DINA. Es más, el joven de 21 años que encontró el cuerpo y que empezó diciendo que era su sobrino y terminó declarando que fue su pareja, también dijo que no sabía que Arancibia fue condenado a prisión perpetua. Según surgió de la investigación que en su momento hizo la jueza federal María Romilda Servini de Cubría, Arancibia y el agente norteamericano Michael Townley fueron los que participaron de la operación en la que se puso la bomba en el Fiat 125 del general Prats. Arancibia fue condenado a prisión perpetua en 2004. Luego recibió doce años por el secuestro de dos ciudadanas chilenas y al unificar las penas, en base a un cálculo que luego fue cuestionado, el Tribunal Oral 5 le otorgó la libertad condicional.
El año pasado, después de 36 años, también la Corte Suprema de Chile condenó a los militares, jefes de la DINA, por el homicidio de Prats.
La primera mirada del fiscal de instrucción Marcelo Roma, la jueza María Fontbona de Pombo y los investigadores policiales de la muerte de Arancibia estuvo dirigida a su pasado político. Sin embargo, las características del homicidio rápidamente llevaron las hipótesis a otro terreno. El asesinato con arma blanca no es típico de las venganzas políticas ni de trabajos realizados por profesionales del crimen. Y, además, se suma el hecho de que casi nadie sabía de su pasado y, sobre todo, que el propio Arancibia le franqueó la puerta al asesino. Nadie forzó la entrada e incluso la puerta era blindada.
El ex agente de la DINA tenía varios taxis y contrataba choferes. Los investigadores tienen la versión de que Arancibia estaba en conflicto con alguno de sus contratados por una supuesta deuda. Esto también se está investigando, aunque pocos creen esa hipótesis.
Lo más probable es que el homicidio tenga relación con la vida íntima del ex agente. Los casos de personas de más de 60 años –Arancibia tenía 66–, homosexuales, asesinadas por jóvenes taxi boys, son frecuentes. “En su momento, les sugerimos a las autoridades de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA) la realización de una campaña para prevenir ese peligro. Hemos tenido muchos casos”, señaló el profesor de Criminalística Raúl Torre. Por las primeras declaraciones que se tomaron en el caso Arancibia, éste recurría en numerosas oportunidades a contratar servicios de taxi boys.
La impresión de los investigadores es que el homicida conocía bien a su víctima, entre otras cosas porque no revolvió el departamento, sino que sabía dónde Arancibia guardaba los 35.000 dólares que desaparecieron. Por esa razón, el joven que encontró el cuerpo y que dijo ser su pareja no quedó fuera del cuadro de sospecha. Según algunos testimonios, a Arancibia se lo vio con al menos otros dos jóvenes, por lo cual se van a investigar su computadora –chateaba habitualmente– y sus llamadas telefónicas.
Arancibia no estaba maniatado. Todo indica que se sentó en un escritorio y el homicida lo sorprendió por atrás asestándole de esa manera la primera cuchillada. Después de eso vinieron diez más. Según declaró el joven que se presentó como su pareja, no falta ningún cuchillo de la cocina y el arma del crimen no quedó en el departamento. Esto hace sospechar que el asesino trajo el cuchillo consigo y se lo llevó.
Por las características del crimen, los investigadores consideran que no debería ser difícil el esclarecimiento. Es un círculo de pocas personas y es muy probable que el asesino haya dejado rastros en las llamadas de celular y en los contactos por Internet.
pagina 12
*
SIP HA YAAA....
*
Policía bonaerense interroga a sospechoso del crimen de Enrique Arancibia Clavel
La Policía Federal Argentina centra las sospechas del crimen del ex agente de la Dina Enrique Arancibia Clavel (57) en un joven de 19 años, que si bien en un principio se identificó como su ahijado, más tarde dijo a la policía que era su pareja.
La noche del jueves, quien fuera condenado a presidio perpetuo por el atentado que terminó con la vida del ex jefe del Ejército, general Carlos Prats y su esposa, Sofía Cuthbert, en 1974, fue hallado con 34 puñaladas en su departamento ubicado en calle Lavalle 1438 de Buenos Aires, a metros del edificio del Palacio de Tribunales.
Según la autopsia, Arancibia Clavel fue ultimado con un "puñal o facón grande" por la retaguardia, exhibiendo lesiones defensivas en sus manos, que dan cuenta de que intentó repeler el ataque. Las heridas mortales, en tanto, fueron localizadas principalmente en la mandíbula, el tórax, el estómago, el cuello y la espalda.
Las sospechas recaen en el joven, ya que fue quien alertó del crimen a los residentes del edificio y, según testigos, se trataría de la misma persona con quien Arancibia Clavel tuvo un altercado a fines de 2010 a raíz de un robo.
Un segundo sospechoso sería otro hombre, a quien el ex miembro de la Dina pagaba para que le realizara compras. De acuerdo al testimonio de uno de los trabajadores del edificio en que vivía Arancibia Clavel, cerca de las 16 horas el individuo llegó a buscarlo y minutos más tarde ambos salieron del departamento.
"La última vez que supimos de él fue como a las cuatro, cuando el ayudante de mi esposo lo vio salir con un tal Ortigosa, que era la persona a quien le hacía encargos", contó María Dono, esposa del encargado del edificio en que residía Arancibia.
Sobre el crimen del ex agente, quien vivía en un sector residencial de clase media y donde también hay oficinas de abogados, trascendió que se indaga un posible móvil pasional y que están siendo interrogadas varias personas. La tesis del robo, basada en que del departamento desaparecieron 3 mil pesos argentinos (3 millones 300 mil pesos chilenos), fue descartada ayer.
Ultimas horas
"Un muchacho bajó gritando. Me dijo que era su ahijado. Decía que había un muerto en el departamento. Eran como las 8 de la noche, pero no quise subir a ver qué había pasado", dijo la testigo.
La mujer, quien realizaba trabajos de costura, describió al chileno como un hombre tranquilo, que se comunicaba frecuentemente con su familia y, además, un fumador empedernido.
Durante el día se dedicaba a administrar los taxis de su propiedad y por las noches salía a comer a una sandwichería de calle Corrientes, contaron sus vecinos.
"Me daba un beso cuando yo pasaba y él hablaba con sus taxistas. A veces estaba como resfriado y me decía hoy no te beso, 'Mary', porque no te quiero contagiar", recordó Dono.
La mujer contó que, en 2007, tras obtener la libertad, Arancibia Clavel compró el departamento.
Acostumbrado a fumar y tomar café, María Dono recuerda que siempre supieron de la condena que cumplió por el crimen del general Prats y su esposa.
"Yo sabía que estuvo detenido, pero yo no soy una persona con maldad, soy una mujer muy educada con las personas que me respetan", agregó.
Si bien Arancibia Clavel vivía solo en su departamento, Dono señala que frecuentemente era visitado por sus hermanas. La última vez que dijo verlas fue hace poco más de un mes. "Son una familia muy unida. Su madre me traía pañuelos, me mandaban chocolates y para mi último cumpleaños él me regaló un perfume y una cajita de costuras", agregó. La mujer descartó que el ex agente haya hecho enemigos.
Atentado
General Carlos Prats: fue asesinado junto a su esposa, Sofía Cuthbert, en un atentado explosivo ocurrido mientras llegaban a su casa en el barrio Palermo de Buenos Aires, en 1974.
Sofía Cuthbert: Casada con el ex comandante en jefe del Ejército, el matrimonio tuvo tres hijas: Sofía, Cecilia y María Prats.
latercera.com
*
http://www.kaosenlared.net/noticia/argentina-aparece-apunalado-represor-chileno-arancibia-clavel***
29 de Abril de 2011Condenado en el caso Prats y otras violaciones de DD.HH. de la Operación Cóndor
Hallan muerto en Buenos Aires al ex agente de la DINA Enrique Arancibia Clavel
Temas relacionados
Familia Prats declara estar “impactada” por muerte de Arancibia Clavel
El misterio rodea la muerte de Enrique Arancibia Clavel
Piñera enfrenta nuevo escándalo por embajador vinculado a la Operación Cóndor
Allende (PS) califica como impresentable que embajador chileno en Panamá esté vinculado a “Operación Cóndor”
*
.jpg)
.jpg)
No hay comentarios:
Publicar un comentario